Sorpresa y desgraciadamente mala es lo que me ha deparado el visionado de esta Joven del Agua, última película del hasta ahora considerado nuevo Spielberg. He de reconocer que consideraba a Shyamalan uno de lo grandes nuevos creadores del cine, dotando al séptimo arte de algunos de los momentos más prodigiosos de los últimos tiempos, gracias a películas esplendidas, como El Sexto Sentido, El Bosque y sobre todo, su obra maestra El Protegido. Pero La Joven del Agua decepciona y lo hace por la nula capacidad que muestra Shyamalan para contar un cuento de hadas de los de siempre, sin dobles lecturas, pero sin magia ni fantasía alguna. Su intención de trasladar la fábula al mundo real llega incluso a extremos irritantes y vergonzantes que logran que el espectador sienta incluso verguenza ajena por el director. Y esto, sinceramente, era lo último que pensaba sentiría en una pelicula de Shyamalan. El mito, quizás levantado demasiado pronto, ha caido. Ya no estamos ante el nuevo Spielberg, y mucho menos cuendo el propio director afirma pretendía homenajear a E.T. el extraterrestre, una obra maestra de la magia, de la imaginación, de la fantasía, de la dirección, del montaje, de la fotografía. TODO ello le falta a La Joven del Agua. Al final, para mí lo único que vale la pena es el prólogo de la película. El cuento contado con los trazos de dibujo un niño. Todo lo demás es vacío y un atentado contra el universo feérico. Aunque por supuesto, su obra anterior a esta Lady in the Water sigue siendo excepcional.
ladyinthewater.warnerbros.com/
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